YOGA DE LOS SUEÑOS: ASUMIR EL CONTROL DEL MUNDO ONÍRICO

Lo que ocurre dentro del mundo onírico puede depender de ti. Poca gente considera esa opción pero lo cierto es que está a nuestro alcance. Sin embargo, no basta con desearlo; deben darse determinadas condiciones para hacerlo posible.
Si bien existen personas más receptivas que otras, es importante tener la mente abierta y aceptar que hay cosas que escapan a la compresión.
A la hora de soñar, el subconsciente toma el control y disfraza el entorno de visiones variopintas, potenciando que las percibamos como si fueran reales.
¿Qué pasaría si detectáramos este truco y nos valiéramos de él para conocernos mejor e ir más allá? Una de las vías para explorar este ámbito recibe el nombre de Yoga de los Sueños y surge del budismo tibetano. Con este método la persona es capaz de identificar que está soñando, mantenerse lúcida en el sueño y, por lo tanto, modificar sus reglas.
Meditar estando dormidos
En las distintas publicaciones de este blog se han abordado toda clase de posibilidades respecto a la finalidad del sueño: que se trate de una vida alternativa, que nos traslade a vidas pasadas o que funcione como herramienta para predecir lo que vendrá. En el budismo tibetano, no se cuestiona la veracidad de los sueños como realidades paralelas.
Hace semanas mencioné al individuo anónimo que aparece de forma recurrente en los míos y en este artículo en concreto, profundizaba sobre el modo en que los diseña a su antojo con un propósito que desconozco.
Mi motivación hacia este asunto viene de lejos. El sueño lúcido actúa como eje central en Liminal, uno de los relatos que escribí y que encontrarás a coste cero entrando aquí. Y no solo eso, sino que dicho concepto tiene mucha relevancia en la trama de mi primera novela, La Balada del Vórtice.
No creo que nada de esto sea casualidad. Ahora mismo el principal interés reside en descubrir qué sucedería logrando la lucidez en los sueños… ¿me impondría al guía espiritual y desentrañaría el misterio que oculta? La clave está en dos términos fundamentales: yoga y meditación.
Alcanzar la lucidez durante el sueño

Acordarse de los sueños no es elección nuestra y aquellos a quienes no nos viene dado de manera innata nos enfrentamos a un obstáculo complejo. Si es tu caso, no temas… la práctica te ayudará.
Daniel Pellicer Roig, biotecnólogo especializado en biomedicina, incide en la necesidad de anotar todo lo que recordemos, por poco que sea, creando así un diario o una guía de sueños que no debemos abandonar, por lentos que resulten los progresos. Al fomentar el hábito, una vez alimentemos y ejercitemos la memoria onírica, estaremos listos para lograr la lucidez.
Llegado este punto, recomienda que llevemos a cabo una serie de pautas con regularidad:
-Preguntarnos si estamos dormidos o despiertos.
-Asegurarnos de que las leyes físicas no presentan anomalías, como objetos que se deforman.
-Comprobar si hay alteraciones en nuestro entorno, por ejemplo, que el reflejo de los espejos no se corresponda con la realidad.
-Analizar si nuestras extremidades parecen desproporcionadas.
Con entrenamiento y perseverancia no tardaremos en notar avances en el proceso.
Condiciones para practicarlo con éxito

Para conseguir una mayor consciencia mental, tanto durante el día como durante la noche, es preciso cargarnos de grandes dosis de concentración.
El maestro en meditación Geshe Tenzin Wangyal Rinpoche propone que antes de dormir recapacitemos acerca de lo vivido a lo largo del día y que manifestemos la intención positiva de mantenernos lúcidos en el sueño. Ese condicionamiento psicológico hará que estemos más próximos al objetivo.
También aconseja que seamos pacientes en el aprendizaje, pues en ocasiones requiere de un periodo de tiempo significativo, de relajarnos y de adaptar el lugar donde acostumbramos a dormir, incluyendo elementos que estimulen sensaciones de paz y serenidad.
De acuerdo con las indicaciones del maestro, al disponernos a dormir, lo primero que hay que hacer es acostarse sobre el lado derecho; luego, imaginar un foco de luz roja situado en la garganta (chakra) y respirar despacio a medida que nos rendimos al sueño. Al sumergirnos en la lucidez desaparecerán las barreras, físicas y etéreas.
Un cambio que nace en el interior
Al margen de las creencias de cada uno, investigaciones realizadas en el campo de la psicolgía apuntan un conjunto de beneficios claros que experimentan las personas que practican el sueño lúcido.
Entre ellos, el portal WeMystic destaca el desarrollo de la capacidad de afrontar enfermedades y traumas e incluso de prepararse para la muerte, mientras que en el espacio Psicología y Mente hablan del incremento del bienestar, la superación de miedos o el impulso de la creatividad.
¿Has practicado el Yoga del Sueño hasta el punto de tener sueños lúcidos? ¡Te leo en comentarios!